El uso de ChatGPT podría cambiar el aprendizaje de idiomas

Jieun Kiaer, profesora de Lingüística en la Universidad de Oxford en el Reino Unido y experta en idiomas asiáticos, ha publicado un libro en el que se apunta que estas herramientas de Inteligencia Artificial (IA) podrían reforzar el dominio de idiomas como el inglés y algunos europeos. Pero también empobrecer el lenguaje, según se señala en University World News.

Gracias a las redes sociales, el inglés está absorbiendo nuevas palabras de otros idiomas más rápido que nunca, pero como el conjunto de datos de ChatGPT tiene un límite de 2021, no se conocerían ninguna de las nuevas palabras que se han añadido al diccionario de ahí en adelante.
En cuanto al hecho de ser menos eficiente con los idiomas asiáticos, Kiaer considera que los países que utilizan estos idiomas se ven obligados a desarrollar su propia tecnología de inteligencia artificial, como ya está ocurriendo con Taiwán o China.
En cualquier caso, Kiaer apunta que algunos idiomas funcionan mejor entrenando a la IA. Aunque en este sentido también señala que, en un mundo globalizado, la falta de diversidad es una seria limitación. «ChatGPT no puede funcionar bien si le faltan datos de continentes enteros», argumenta.
La autora ha subrayado, además, otras limitaciones de la IA, como la dificultad de captar los significados complejos que los humanos utilizan a través de un uso instintivo del lenguaje, como la ironía, la metáfora o el sarcasmo.

Kiaer está en contra de prohibir herramientas como ChatGPT en escuelas y universidades y cree que los desarrolladores, profesores y legisladores deben trabajar juntos para encontrar la mejor manera de utilizar dichas herramientas en la educación y la investigación. Para Kaier, resultaría conveniente elaborar un modelo híbrido, en lugar de deshacernos de la herramienta.
Todas las señales apuntan a que la IA revolucionará el aprendizaje de idiomas, permitiéndonos aprender más fácil y eficientemente que nunca. Los estudiantes no necesitarán pasar tanto tiempo
memorizando, ya que la tecnología pondrá todas las respuestas al alcance de su mano. En cambio, en opinión de Kaier, “se necesitarán aprender habilidades de pensamiento crítico, análisis y aplicación desde una edad más temprana. Los planes de estudio deben comenzar a adaptarse a esa realidad. Se ha realizado una renovación del plan de estudios escolar necesaria desde la invención de Google”.
Kaier señala también que los exámenes y la forma en que se evalúa a los estudiantes tendrán que cambiar y habrá que reformular las preguntas. “Los megaexámenes como el Test of English as a Foreign Language (TOEFL) y el Test of English for International Communication (TOEIC) se volverán inútiles”, apunta.
Según la autora, la IA podrá desarrollar exámenes personalizados a la medida de las personas y que medirán con mayor precisión sus niveles de aprendizaje de idiomas. La IA también hará que el aprendizaje sea más accesible y reducirá la necesidad de los costosos programas de inmersión en el extranjero. Por este motivo, considera que las escuelas deberían adoptar el aprendizaje de idiomas con el uso de estas herramientas.